Con Amonio para Rutenio

jueves, 12 de marzo de 2009

Guatemala, 12 de marzo de 2009




Querido Rutenio:


Desde el fondo de mi Catión te escribo. Simplemente no encuentro las palabras que definan esta Afinidad que siento por tus electrones. Me gustaría amalgamarte dentro de mis neutrones, pero creo que tu baja electronegatividad no lo permite.

Lo que me Sulfura es que te gustan elementos más antiguos y con un peso molecular más bajo. Pero son elementos tan agresivos, que tu Spin se distorsiona a cada rato y cambias de Estado frecuentemente.

Sueño con caminar contigo por Europio a recorrer el compuesto iTalico de tu mano. El lugar perfecto ya lo encontré, sólo falta que tú, ¡oh Rutenio! Dejes a esa Soda Caústica y quieras recorrer mis orbitales. Tus números de Valencia se acoplan tan bien a los míos, que siento que nos Transformaremos algún día en un gran Compuesto, en el que la estabilidad de nuestro Estado se mantenga a temperatura y Presión normal. Lo bueno de todo es que nuestros puntos de ebullición difieren en varios Celsius, y es lo que me gusta de tu Enlace conmigo, que estabilizas todos mis puntos. No me equivoco en decir que más que un Enlace Iónico, el nuestro puede sería un Covalente Polar, en el cuál compartamos nuestro estado, nuestro spin, nuestras valencias.

Como dice la Ley: “la energía no se crea ni se destruye, sólo se transforma”. Y tú transformas mi Sistema y mis Alrededores. Todo se ve policromático cuando estás a mi lado.
Esperaré, hasta que una reacción exotérmica de la Caústica te libere de ese enlace forzado por un pequeño catalizador, y tu órbita y la mía se vuelvan a encontrar… si el universo lo permite.


Con todo mi Amonio…