El Cuento de Alicia

jueves, 22 de mayo de 2008

Año 1.

Se había olvidado de tomar una determinación. La determinación de terminar. Tenía que ponerle fin a su cuota de suficiente, ya que cada vez se agrandaba su suficiente y con cada gota de permisividad extra, su cuota de “lo suficiente” se estaba aproximando al infinito. Ya era tiempo. Su melancolía se había vuelto crónica. Cada vez que decía “mañana termino la nube que me fabriqué”, se daba cuenta que siempre estaba en el hoy, por lo tanto su mañana nunca llegaba. Alicia era atemporal.
Para ella, su nube era placentera, suave, armoniosa, cálida. Pero estaba muy alta. Tan alta que sólo en sueños se podía llegar. Estaba tan alta, que no había nadie más que ella y los productos de su imaginación, tan fértil, tan irreal. A veces llegaba un ser alado, parecia un hombre, a visitar y dejarle gotas de racionalidad, de realidad. Se dio cuenta que él podía llegar porque podía volar, pero vivía mucho más abajo de su nube. Él tenía alas, ella sólo su nube.

Alicia, necesitaba abandonar el lugar que por tanto tiempo había creído como suyo, como algo seguro. Hasta ese momento no se había percatado, que ese lugar al que estaba aferrada no era sino sólo sombras, sin color. Era una perpetua fiesta, pero bizarra. Había otros que estaban con ella en la nube, pero no los veía a color, sonrientes pero sombríos. Algunos todavía tenían en sus pupilas un color brillante: verde, café, azul. Se miró en el espejo y poco a poco empezó a reconocerse… todavía tenía color.

Otra vez aparecía él, volando, unas veces la visita era constante, otras veces parecía que olvidaba el camino, o simplemente no lo quería recorrer. Ahora lo miraba claramente: espigado, con mirada penetrante, como inquisidora; sereno pero con señales claras de haber sufrido una metamorfosis. “Talvez tuvo su nube, o vivió en las sombras de las cavernas y le crecieron alas”, pensó.
Al principio sentía curiosidad, le intrigaba ese ser tan extraño que a veces la quemaba con su lengua de fuego, que la irritaba con los destellos de su mirada. La hacía convulsionar hasta que otro detalle de su sombría nube aparecía ante ella, detalle que nunca antes había visto y que ahora le hacía querer, y cada vez con más fuerza, el abandonar la nube. Se miró las manos y los pies… tenían color. Al igual que su cabello, sus ojos y labios. Se podía ver el corazón de un rojo brillante. “Si”, pensó, “todavía tengo color”.

Y tomó la determinación de Saltar.

En el mundo de los blogs

viernes, 16 de mayo de 2008

Debido a que disfruto el leer blogs de lo más variado, me he encontrado uno que me entretiene y divierte. Es el diario de un neurótico, que vive en el otro lado del continente, le pone Sonia # tal a la chica de turno, se autodenomina un pesado incorregible y tiene cada historia!! Es un hombre que anda buscando el amor (¿cuántos de nosotros no?), pero sufre de ciertas manías y complejos (¿cuántos no?), que le dan el toque de humor negro a sus post. Tiene una forma clara y sin tapujos de decir sus pensamientos (aclara que todo lo escribe con un mes de retraso). En algún momento nos podríamos identificar con alguna de las actitudes de alguna Sonia o con el mismo Elemental. Ahora le tocó la Sadomasoquista, realmente se los recomiendo si quieren reirse un poco y "meterse" en la vida de otro (si lo publica, es con su permiso!!!).

Angeles

jueves, 8 de mayo de 2008

Dicen que los ángeles son seres alados que viven en el cielo. Que forman parte del batallón celestial y que ayudan a los humanos cuando se ven en problemas. Se les podría imaginar con apariencia andrógena, bellos, irradiantes de luz, vestidos de blanco o con indumentaria parecida a la de los centuriones. Algunos podrían tener apariencia de niños y otros de personas adultas. Pero siempre dicen que actúan como los mejores ilusionistas de hoy en día, aparecen y desaparecen sin si quiera dejar rastro. Eso es lo que dicen.

Yo creo que los ángeles son más terrenales, se encuentran entre nosotros. Algunos son mis amigos.
Tengo un par de ángeles (o más), a quienes respeto y les tengo un gran cariño, los quiero. No voy a poner sus nombres aquí, pero me imagino que sabrán ellos que éste post es para ellos. Porque queriendo o sin querer me han enseñado muchas cosas, han abierto mi mente y mi corazón. Es posible que piensen que sus palabras no llegan al fondo de mi ser, pero han movido mi fibra interna.

Y aunque no quieran mis GRACIAS, aquí se las dejo.

El Retrato

lunes, 5 de mayo de 2008

Empiezo las pinceladas de tu rostro. Sin extremismos, los extremos no me gustan. Empiezo analizando la paleta de colores…

Tu piel podría ser blanca. Aunque no como de leche, que aparente no tener vida; o como la nieve, fría. Ni tampoco como la noche más oscura de nuestras vidas, o como el hollín de alguna chimenea encendida para calmar el frío del cuerpo y del alma. Podrías tener un toque de canela o algo más afrutado, como el melocotón, así como yo. O bien, tener la perfecta combinación de café con leche, podría también ser al revés.
Podrías tener la gama entera de colores en los ojos, que igual me perdería en ellos.

Luego las formas…
Tu nariz perfilada armoniosa con tu rostro. Al igual que tus labios. Aunque prefiero los labios carnosos a los extremadamente delgados. No me gustan los extremos, me repito.
Tus manos masculinas, fuertes y delicadas (sin contradicción alguna), capaces de trabajar el azadón, como de tocar el piano. Que me derritan sólo con el toque de la punta de los dedos y que me ayuden a levantar cada vez q lo necesito.
Tus pies, que dejen huella por dónde pasa. Que quieran andar siempre, que te lleven a buscar siempre, que te ayuden a encontrar…
Tus hombros, perfectos para dormir, perfectos para reír, para soñar, para llorar.

Pero más importante, es lo que no puedo pintar: el corazón, el alma, la mente, los valores. Todo eso sólo lo puedo describir, pero hoy no encontré las palabras…creo que se fueron a jugar.

Salva Mea Tonight

viernes, 2 de mayo de 2008

Lo maravilloso de la música es que hay para todos los gustos. Además cada quién se encuentra identificado con las experiencias que sus compositores, ya sean inventadas o reales, nos regalan. Hay temas, con los cuales me identifico en determinado momento o para siempre.
He aquí dos: Tonight tonight, un clásico de Smashing Pumpkins de 1996. Aunque ha pasado tiempo, es de esos temas que al principio me gustaba, pero no le encontraba la esencia, hoy en día ya le encuentro el sentido, lo comprendo mejor.
La otra de uno de los géneros más incomprendidos,: el electrónico. Faithless, a mi gusto personal uno de sus mejores exponentes, con su tema Salva Mea de su último disco Reverence/Irreverence (muy recomendable).


Tonight, Tonight"

Time is never time at all
You can never ever leave without leaving a piece of youth
And our lives are forever changed
We will never be the same
The more you change the less you feel
Believe, believe in me, believe
That life can change, that you're not stuck in vain
We're not the same, we're different tonight
Tonight, so bright Tonight
And you know you're never sure
But you're sure you could be right
If you held yourself up to the light
And the embers never fade in your city by the lake
The place where you were born
Believe, believe in me, believe
In the resolute urgency of now
And if you believe there's not a chance tonight
Tonight, so bright Tonight
We'll crucify the insincere tonight
We'll make things right, we'll feel it all tonight
We'll find a way to offer up the night tonight
The indescribable moments of your life tonight
The impossible is possible tonight
Believe in me as I believe in you, tonight


Salva Mea

How can I change the world if I can't even change myself?
I cannot change the way I am?
I don't know, I don't know.
I take a look at the world behind these eyes,
Every nook, every cranny reorganize,
Realize my face don't fit the way I feel. What's real?
I need a mirror to check my face is in place,
Incase of upheaval, fundamental movement below,
What's really going on I want to know,
But yo, we don't show on the outside, so slide.
Just below my skin I'm screaming...
I need a mirror for my spirit,
Yeah, can you hear it?
When I get deep, want to hear myself sleep,
Not drowning, tumbling around and around in the voices
Like a crowd in my head so loud, I wonder what it's like to be dead,
I hope it's quiet, noise in my head like a riot,
Any remedy you have for me I'll try it.
Just below my skin I'm screaming...
I'm going deep, so deep that I can't sleep,
The pills ain't cheep but the bills are steep,
So I lick up with a booze and a spiff,
Try to snooze,
But who's dreaming, this is win or loose,
Put down the drink, try not to think,
Let it go, fundamental movement below,
And yo, reality is dreaming,
Just below my skin I'm screaming...